"¡Vaya susto!"

Acompañado de su perro, un pastor ordeña una cabra. En eso, el animal se vira y le reclama:
"¡Tantos años tocándome las tetas y nunca me has dado un beso!" Sorprendido, el pastor sale corriendo por el campo seguido por el perro. Cuando por fin se detienen, el perro se le queda viendo al asustado pastor diciéndole: "¡Vaya susto que nos dio la pinchi cabra!"

Comentarios

Entradas populares de este blog

Así era Francisco Ignacio Madero

PAPAS EN ESCABECHE

Una bonita historia. La historia del Relámpago y el Moro de Cumpas‏